Para los formadores, obtener y mantener la atención de los asistentes es un tema bien serio. Es preciso encender la imaginación de los participantes y abrir sus mentes a las ideas nuevas. La investigación cognitiva demuestra que el humor fomenta la escucha, el pensamiento crítico, la creatividad, el aprendizaje y la memoria. Si empleas el humor en tus sesiones formativas, puedes ayudar a tus alumnos a agilizar sus mentes, a ser flexibles ante el nuevo conocimiento y a resolver problemas de manera creativa. En definitiva, sus cursos serán más divertidos y más eficaces.
Para los formadores, obtener y mantener la atención de los asistentes es un tema bien serio. Es preciso encender la imaginación de los participantes y abrir sus mentes a las ideas nuevas. La investigación cognitiva demuestra que el humor fomenta la escucha, el pensamiento crítico, la creatividad, el aprendizaje y la memoria. Si empleas el humor en tus sesiones formativas, puedes ayudar a tus alumnos a agilizar sus mentes, a ser flexibles ante el nuevo conocimiento y a resolver problemas de manera creativa. En definitiva, sus cursos serán más divertidos y más eficaces.